jueves, 8 de diciembre de 2016

Diego Ojeda.

Hola a todos de nuevo. Hoy vengo con algo nuevo, algo que he tenido ganas de hacer desde hace tiempo. Es verdad que tengo completamente abandonado el blog, pero espero que con esta novedad lo vuelva a retomar tanto como antes.

Quienes me conocen saben que adoro leer y que siempre tengo un libro -o dos- en la mesilla de noche, o en el bolso. Así que ¿por qué no hacer reseñas en el blog? Motivar a leer y que me enseñéis libros que me he estado perdiendo todo este tiempo. Esa es la nueva novedad en el blog, espero que me sigan acompañando en estos silencios para recordar.

Como en todo siempre tiene que haber un principio, en mi opinión no hay mejor principio que quien me rescato de los peores momentos, quien se introdujo en mi ser y me hizo exprimir todos mis sentimientos al máximo, fue quien le puso nombre a esas cosas de la vida que yo no comprendía. Hablo de Diego Ojeda. Diego Ojeda es de esos autores que se integran en tu ser con facilidad, es de los que tienen la palabra exacta en el momento adecuado, quien habla de sus experiencias como si fuesen las tuyas propias y quien te cuenta todo como es, de esos autores de los que nunca te olvidas, de esos de los que siempre quieres más.

El poemario del que hablaré hoy es el segundo que ha publicado, y se trata sin duda alguna de Mi chica revolucionaria, este libro llego a mis manos en el momento justo para devolverme la seguridad, en el momento en el que no me comprendía bien a mi misma. Quien haya leído este poemario me entenderá, ya que después de este libro no se vuelve a ser el mismo, no se puede ver la vida de la misma forma.




Con este poemario Diego Ojeda expresa todo su amor a la chica revolucionaria que ha cambiado su vida, robado su corazón y le hace ver el mundo mejor. Cada poema es un recuerdo a la alegría de encontrar y corresponder al amor, de encontrar la revolución hecha a su medida, de los perfectos domingos cum laude y de las revoluciones en la cama, de sus sueños y su casa.
Su chica revolucionaria es la dinamita de todos los poemas que podemos encontrar en este libro.  Sin dudas es el mejor poemario que he podido encontrarme hasta ahora. Sin con esto no les he convencido para leerlo, les dejo una pequeña parte de mi poema favorito, que sin dudas es Mi chica revolucionaria.
"Yo me preocupo
pero ella es libre
y por eso la quiero,
y es normal que se juegue la vida en un precipicio,
es su vida.
Mi chica revolucionaria
no es ninguna heroína de cómic,
no desfila en pasarelas
y vive en clase turista".